domingo, 29 de diciembre de 2013

Y por último Lorca simplemente enamorado


Vuelvo a Lorca para terminar mi recorrido por una obra que siempre fue encendida y que se remonta a mis conversaciones con mi primer amigo poeta: José Gilar.

Hubo un momento en que España fue lorquiana y se produjo una cierta peregrinación interior para rescatarlo.


Recuerdo que un día defendía la música electrónica de mi generación. De mi instituto había salido un grupo musical de éxito: Los Pekenikes y yo ponía como ejemplo de su melodía una instrumentación llamada "Los cuatro muleros". ¡Pero qué modernidad y qué leches!, dijo mi padre,esa canción es de Garcia Lorca. Y, efectivamente,detrás de aquella música había una letra que hablaba del amor y de la búsqueda.

Los cuatro muleros

De los cuatro muleros
que van al campo,
el de la mula torda,
moreno y alto.

De los cuatro muleros
que van al agua,
el de la mula torda
me roba el alma.

De los cuatro muleros
que van al río,
el de la mula torda
es mi marío.

¿A qué buscas la lumbre
la calle arriba,
si de tu cara sale
la brasa viva?


Hubo un Lorca de pasión y enamorado que escribió "Los sonetos del amor oscuro" poco antes de morir. Desde su "Libro de Poemas" hasta esos sonetos su obra está llena de poemas como éstos que otra gitana apasionada: Lola Flores, recita, acompañada a la guitarra por su marido Antonio González, "El pescailla". Escuchamos: "Es Verdad", "Por el arco de Elvira" y "Soneto de la dulce queja".


Después de que la fecha exacta de su muerte haya sido objeto de una larga polémica, parece definitivamente establecido que Federico García Lorca fue fusilado a las 4:45 h de la madrugada del 18 de agosto, en el camino que va de Viznar a Alfacar. Su cuerpo permanece enterrado en una fosa común anónima en algún lugar de esos parajes, junto con el cadáver de un maestro nacional, Dióscoro Galindo, y los de los banderilleros anarquistas Francisco Galadí y Joaquín Arcollas, ejecutados con él. Trescastro presumiría después de haber participado personalmente en los asesinatos, recalcando la homosexualidad de Lorca.. La fosa se encuentra en el paraje de Fuente Grande, en el municipio de Alfacar.

Otro actor español apasionado,amigo de los amigos de Lorca: Buñuel, Dalí, Alberti  y otros de aquella generación magnífica, recita otra muerte,la del torero Ignacio Sánchez Mejía, uno de los amados de Federico. Su poema "La sangre derramada".



Y a pesar de tanta tragedia, allí donde sus controvertidos restos se encuentren, puedo imaginarme un fin de fiesta con Federico donde sus amigos cantan su "Anda jaleo, jaleo".Alba Carmona y Sandra Carrasco, por ejemplo. Ese jaleo que el armó en la poesia en español del siglo 20.



Anda jaleo
Yo me subí a un pino verde
por ver si la divisaba,
y sólo divisé el polvo
del coche que la llevaba.

Anda jaleo, jaleo;
ya se acabó el alboroto
y ahora empieza el tiroteo.


En la calle de los muros
mataron a una paloma.
Yo cortaré con mis manos
las flores de su corona.

Anda jaleo, jaleo;
ya se acabó el alboroto
y ahora empieza el tiroteo.


No salgas, paloma, al campo,
mira que soy cazador,
y si te tiro y te mato
para mi será el dolor,
para mi será el quebranto.

Anda jaleo, jaleo;
ya se acabó el alboroto
y ahora empieza el tiroteo.